Un rascacielos nuevecito en una gran ciudad ya no es noticia. En Nueva York, en concreto, existen tantos que los de nueva construcción en ocasiones pasan casi desapercibidos. El skyline de la Gran Manzana, sin embargo, será próximamente decorado con un nuevo edificio que será imposible ignorar, debido a su diseño único y absolutamente vanguardista. El proyecto, elaborado por el equipo del estudio de arquitectura Oda, consiste en la realización de un rascacielos dotado de seis jardines colgantes y panorámicos, que serán emplazados a distintos niveles de altura y con diferentes orientaciones. Este lujosísimo condominio nacerá en la en la calle 44 y estará compuesto por un gran número de apartamentos prestigiosos, además de oficinas y ejercicios comerciales.
El rascacielos tendrá una altura de 182 metros, por un total de cuarenta y una plantas. No todos ellos, sin embargo, serán habitables, ya que seis de ellos estarán destinados a grandes espacios verdes con vistas sobre el corazón de Manhattan. Cinco de estos jardines serán de uso común para los habitantes del edificio, mientras que el sexto será de pertenencia exclusiva de los afortunados propietarios del ático, el inmueble sin duda m0s exclusivo y elegante de este nuevo coloso neoyorkino. En estos seis oasis colgantes se cuidarán hasta los más mínimos detalles y estarán repletos de flores y plantas tropicales, que darán vida a pequeños y acogedores paraísos a media altura en los que aislarse del caos que reina en la fascinante metrópolis americana.
Tratándose de un edificio tan exclusivo y sin igual en los Estados Unidos, los apartamentos tendrán seguramente un precio más bien elevado. Evidentemente los precios establecidos por el estudio Oda estarán en línea con la calidad de los inmuebles, los cuales tendrán unos acabados impecables y una decoración exclusiva. El proyecto, tan complejo como costoso, será financiado completamente por la Triangle Equities, la agencia inmobiliaria más famosa de la Gran Manzana, que ha visto en esta oportunidad el gran potencial económico y de recuperación de la inversión. Por extraño que parezca, el nuevo rascacielos estará libremente inspirado en el Bosque Vertical, recientemente inaugurado en Milán, el cual se ha hecho famoso precisamente gracias a sus espacios verdes situados entre las distintas plantas. El mismo ha gustado tanto que su creador, el italiano Stefano Boeri, ha ganado un prestigioso premio arquitectónico a nivel internacional.