Apartamentos de lujo en alquiler en Río de Janeiro

La “cidade maravilhosa” no necesita ser presentada. Cuna de la Samba y de la Bossa Nova, esta bellísima ciudad fue la capital de Brasil y continúa siendo un símbolo de esta nación. Además de la diversión, la ciudad ofrece muchas oportunidades de negocios y alberga algunas de las empresas más grandes del país. Su paisaje urbano ha sido inscrito en el patrimonio cultural de la Unesco. Vivir en Río significa adoptar un estilo de vida tranquilo y alegre, pero también muy saludable ya que el clima de la ciudad propicia la práctica del deporte al aire libre: fútbol, futvóley, correr, ciclismo, surf, ala delta, excursionismo, volley playa, submarinismo, etc.. Podéis comprar un lujoso apartamento en Leblon, el barrio más caro de la ciudad, o un ático en Ipanema y estar cerca de playas maravillosas y elegantes boutiques que os harán vaciar facilmente la cartera. Además, en Ipanema podéis encontrar a vuestra musa como le sucedió a Tom Jobi,. Elegantes barrios residenciales, como Lagoa, Gávea y Jardim Botânico, se extienden a espaldas de la Laguna Rodrigo de Freitas. Si compráis un apartamento de alto standing en uno de estos barrios os beneficiaréis de su cercania al Jardim Botânico y a los buenos bares y restaurantes. Copacabana es el barrio más famoso de Brasil y comprar un ático en un condominio de lujo en este barrio es símbolo de buen estatus social. Además, Copacabana está llena de bares con música en directo y discotecas exclusivas que frecuenta la gente VIP de la ciudad. Si preferís la tranquilidad, comprad una villa de lujo en Leme. Otra buena opción es Invertir en una oficina de alto standing en uno de los modernos edificios del centro de la ciudad y conocer la bellas iglesias barrocas, edificios de la época colonial y museos, así como probar un “pastel de nata” en la tradicional Confeitaria Colombo. Si duda, los buenos planes abundan: visitar los maravillosos puntos turísticos como el Pão de Açúcar y el Cristo Redentor; apreciar los Arcos, la bonde o las rodas de samba de Lapa; encontrar a los artistas e intelectuales en el barrio de Santa Tereza; finalmente, asistir al derby Fla-Flu en el estadio más famoso del mundo: ¡el Maracanã!