La construcción en el barrio Vozdvyzhenka en Kiev, la capital ucraniana, empezó en el 2003: después de 10 años de trabajos finalmente los equipos de trabajo y las pilas de materiales de construcción han desaparecido
El nuevo barrio retoma el estilo barroco ucraniano de los siglos 17º y 18º, con preciosos edificios residenciales en ladrillo rojo, amarillo y azul turquesa, que cubren 42 acres.
El proyecto urbano de lujo ha costado 100 millones de dólares y parece que ya el 75% del las 398 residencias ha sido vendido.
La idea de tener un distrito residencial de lujo en el centro histórico de Kiev surgió en los años 90: la construcción efectiva se empezó en 2003 y los últimos tres edificios se han terminado en mayo de este año.
Los edificios, entre 3 y 5 pisos de altura, se han proyectado en estilo barroco ucraniano pero cada uno tiene alguna variación para evitar la uniformidad. El interior de los apartamentos está terminado, aunque los propietarios tendrán que instalar baños y cocinas.
Las residencias varían de los 60 a 300 metros cuadrados, y están valorados en cerca de 4000 dólares el metro cuadrado.
Antes que comenzase la construcción, la zona estaba plagada por antiguos edificios y tenía tres calles principales, todas en malas condiciones. Las calles han sido restauradas y ha sido construida una cuarta, Honcharna Street. Los edificios residenciales más lujosos del proyecto han sido construidos a lo largo de Honcharna: siendo un punto muerto, cuenta con una posición tranquila y alejada del ruido del tráfico.
En cierto sentido, Vozdvyzhenka refleja la moderna Kiev, entre nuevos locales de moda y antiguas iglesia que recuerdan el período soviético.
El proyecto es atrayente por su posición, y desde el comienzo ha llamado la atención: los precios de prefabricación, iniciados en los 2500 dólares el metro cuadrado en el 2004, se han doblado en el 2006.
Uno de los apartamentos más lujosos, en Kozhumiatska Street, ha sido comprado durante el verano del 2008 por 7000 dólares el metro cuadrado.
La crisis financiera global ha golpeado el mercado inmobiliario ucraniano pocos meses más tarde, y lo que había comenzado como un gran éxito para los constructores, se ha convertido en una pesadilla.
Los trabajos de construcción han sido interminables, a causa de varios problemas, entre ellos también el uso de los materiales de mala calidad: esto ha llevado al descontento de los inversores.
Los medios de comunicación han empezado a llamar a Vozdvyzhenka la ciudad fantasma de los millonarios.
Pero los constructores no se han rendido y, al final, las cosas han comenzado a mejorar.
Hoy solo 90 de las 300 propiedades vendidas son realmente ocupadas, mientas que el resto están en alquiler o en fase de restructuración.
Los constructores sostienen que sus compradores constituyen la élite del país: son funcionarios de estado y gobierno, pero también artistas, como la estrella ucraniana Gallina.
Muchos de ellos quieren crear su propio espacio, por ello muchos de los apartamentos están en fase de proyección.
El barrio mismo tiene muchos cambios de recalificación, con la aparición de numerosas galerías de arte, bancos y restaurantes.