Tras un periodo particularmente “turbulento” en el que ha estado continuamente en el centro de los cotilleos por algunas discutibles “actuaciones”, Justin Bieber ha decidido buscar casa en el sur de Estados Unidos y, en particular, en Atlanta (Giorgia).
Como era de esperar, para la elección del agente inmobiliario el “prodigio” del pop no se ha contentado con cualquier profesional. Parece, de hecho, que ha encargado la tarea a Josh Altman, protagonista del programa televisivo “Million Dollar Listing”. Tras una minuciosa búsqueda, Josh y Justin han puesto los ojos en un lujoso inmueble de 11 millones de dólares en el exclusivo barrio de Buckhead.
La villa elegida por Justin mira a la Blackland Road, a poca distancia de la residencia de los Usher y Young Jeezy. Está circundada por un enorme parque y tiene siete dormitorios, trece baños, una piscina, una sala de cine, un spa y un gimnasio. Además, conforme a los deseos del artista, ocupa una posición central pero no es visible desde la calle.
Con tal propósito, la búsqueda de Justin y de Josh se ha centrado fundamentalmente en los barrios más prestigiosos de Atlanta, donde hay muchas casas con jardín proyectadas para estar a la moda pero en un entorno silencioso y apartado. Atlanta es una ciudad tranquila con menos paparazzi que en California: para Justin, por ello, representaría una especie de “refugio”, y no una verdadera residencia. El cantante ha declarado, de hecho, que pretende mantener también, por motivos profesionales, su casa de Los Ángeles.
La noticia, sin embargo, no ha suscitado el menor entusiasmo entre los habitantes de Buckhead: por el contrario, ha provocado una protesta inmediata. Los residentes han salido a la calle para manifestarse contra Bieber. Los pasados excesos de la estrella del pop, muchas veces arrestado por las fuerzas del orden por alteración del orden público, actos violentos y conducción en estado de ebriedad, han convencido a muchos padres de familia de que Justin representa un ejemplo negativo para sus hijos. Parece que la tranquila ciudad de Atlanta no está acostumbrada a los excesos de las estrellas de Hollywood…
