El actor Jason Priestley, que interpretó a Brandon en la serie televisiva “Sensación de vivir” (Beverly Hills 90210), acaba de vender su casa de cuento por dos millones de dólares, perdiendo una suma de 140.000 dólares respecto al precio por el que la compró. La puesta en venta de la casa en el mercado inmobiliario ha tenido lugar justo antes del nacimiento de su primer hijo, y el actor ha tenido que bajar el precio para poder vender su fantástica propiedad. Pero no se puede decir que la vivienda no sea apetecible ni que no valga cada dólar que se pide por ella.
La casa se encuentra en el distrito del Lago Toluca en California y es el sueño de aquellos que aman la comodidad, el cuidado en los detalles y la modernidad, con una mirada a lo clásico y a lo rústico. Así se presenta esta casa, desde su preciosa puerta de madera por la que se accede a una elegante escalera que conduce a la planta superior.
Los techos varían de sala en sala y se combinan con modernísimas lámparas de fibra óptica y con vigas a la vista. Todas las habitaciones están cálidamente iluminadas por la luz californiana, como el estudio de madera y la cocina, de color claro y con todas las comodidades, así como la sala de estar con biblioteca, ideal para una noche tranquila en compañía de un buen libro o de una emocionante película, que puede verse en la gran televisión situada entre armarios y estantes. La misma atmósfera se respira en el otro salón, de color verde y con una gran chimenea y bonitos cuadros.
Otra chimenea encontramos en el dormitorio principal, casi todo de madera, donde el espacio y el lujo dominan su suntuoso baño, con ducha tándem y espejos dignos de un salón. La vivienda dispone también de spa.
También los exteriores de esta lujosa villa en California son para tenerlos en cuenta: su enorme piscina, su patio, sus lujosos jardines… En pocas palabras, esta casa ofrece lo mejor que se puede esperar y se presta a magníficas fiestas en la piscina con elegantes invitados y mucha diversión, pero también a una barbacoa a la sombra bajo los pórticos con vistas a los jardines.